Queremos contaros lo que vimos y vivimos durante nuestra visita a la Finca de Calcetines con Andrea Izquierdo, el alma mater de este precioso proyecto y, por supuesto, Tadeo Zapatillas, un cachorro de mastín que desborda alegría.
Paseamos por la finca junto a Andrea que es todo pasión por los caballos. Los habla con cariño, los acaricia, los mima y los animales le responden. Lleva dentro los caballos y la finca, y eso se nota cuando nos habla. Lleva en ella toda la vida ayudando a su padre, que seguro que muchos conocéis como Pistón, todo un experto en el mundo ecuestre y que ostenta numerosos premios como valedor de la raza española. Durante el paseo nos enseña el huerto, la zona de descanso, el salón de las celebraciones, así como toda la extensión de la finca que de verdad, es una auténtica maravilla.
En la Finca de Calcetines se organizan cumpleaños, campamentos de verano, talleres, días en familia. Los niños acompañados, siempre por monitores especializados, tienen una relación directa con los caballos, los dan de comer, los cepillan, aprenden los cuidados que necesitan estos animales y, algo muy importante, a respetar a los animales.
Una de las actividades que realizan los niños es la Búsqueda del Tesoro. Los niños corren por toda la finca buscando pistas y resolviendo acertijos relacionados siempre con la ganadería. Después una buena merienda y os aseguramos que ni el que celebra el cumpleaños ni sus invitados olvidarán una jornada como la que han pasado.
Andrea, es quiromasajista especializada en rehabilitación infantil y por eso en la Finca de Calcetines los niños con necesidades especiales pueden recibir sesiones de equinoterapia. Es una terapia integral empleada por profesionales de la salud física o mental para la rehabilitación de niños, adolescentes y adultos a nivel neuromuscular, psicológico, cognitivo y social con el caballo como herramienta terapéutica.
Si quereis podeis ir a ver la finca, mediante cita previa y de manera personalizada Andrea os enseña las diferentes actividades que se realizan en sus instalaciones.
Puedes contactar con ella en la siguiente dirección de correo electrónico lafincadecalcetines@gmail.com
Ah¡¡ Seguro que os estáis preguntando: ¿por qué se llama la Finca de Calcetines? En homenaje a Homer, un mastín de labrador enfermo de epilepsia, una horrible enfermedad que le tenía prácticamente anulado y totalmente dependiente. 90 kilos de perro que disfrutaba encontrándose con los niños y que hasta el último momento demostró su valía para ayudar a las personas. Homer se apodaba así porque le encantaba mordisquear todos los calcetines, y por eso, porque Homer sigue ahí, se llama La Finca de Calcetines.
